En los grupos de escritores abundan los autores noveles y también, muchos que están entusiasmados por el último libro que escribieron y preguntan si podrán vivir de esta actividad.
Decididamente, no. En Argentina es casi imposible que un escritor viva de lo que gana vendiendo sus obras, siempre debe tener otro ingreso para mantenerse o mantener a su familia. Sin embargo, ser escritor es una VOCACIÓN y quien escribe lo hace por placer, con gusto, se siente feliz escribiendo, transmitiendo su inspiración para llegar a otros.
Hay escritores de fantasía, otros que describen la parte más oscura y dolorosa de la realidad, otros que parecen fascinados mostrando historias policiales, pero para todos y cada uno de ellos hay un lector interesado. Por fortuna, los seres humanos tenemos distintos gustos y por lo tanto, siempre habrá alguien que prefiera un género literario y el arte está en saber hallarlo.
Como ocurre con los músicos, artistas plásticos y cada una de las ramas del arte, hay que buscar y hallar el nicho en el que nos hallamos más a gusto y luego, encontrar a quienes disfruten ese espacio. Una regla básico que no hay que desechar nunca: NO DARSE POR VENCIDO. SI ESCRIBIR TE HACE FELIZ, ¡ESCRIBE!
